jueves, 29 de octubre de 2009

Descabellado

Los ojos ensalzados,
con una mordaza atónita.
Soy hijo de un beso alquitranado,
amargo, seco, apático.

Metamorfoseado en un jején
soy Pandora sin caja
cuando tu voz penetra su oír
de bípedo irrisorio.

¡Cuidado! Aquí y allá
no se puede estar
(sos mi dios,
pero no sos Dios).

Y mi fe se acaba,
nadie reza por mucho tiempo
si la súplica no se escucha;
sin cruzar la línea.

El tizne gris de la acera
me grita y me susurra tu nombre
tan fuerte, que sigue presente
tan suave, que lo siento lejano.

martes, 20 de octubre de 2009

XX

¿Y si un día de estos,
gritando desaforadamente,
arrancamos esos lastres
de la cabeza oxidada
con un trajín deleznable?

Mezclamos ansias con costumbre,
y cantidad necesaria de esperma.
Y hacemos una micro nada.
O un hombre que dejará de existir,
cuando la dama de lo alto lo olvide.

Ella peina y maquilla sus angustias,
nos conoce y nos desconoce.
Y a la vez, bosteza nuestras almas,
con un sonido muy gutural,
que la penetra y la deshace.

¿Somos o no somos?
Fugaces como el alba
Las sombras de tu boca beso,
Y evoco imágenes de tu pecho,
Pero, si sos, si es que realmente sos
sólo ella lo sabe.

lunes, 19 de octubre de 2009

XIX

Gotas rojas caen,
devoradas por un enjambre
de furias agitadas,
de pasiones sin llanto.

El pasto que es,
o que no es
(dependiendo del observador
y de la luz, que se mueve)

Y cae el castillo de naipes,
y el tiempo nos escupe en la cara
su saliva amarga de lo inútil
cuando tenemos la nariz pegada al suelo.

El señuelo se activa -ella partirá-
y yo seré, o no seré
(dependiendo de su mirada
y de la luz, que se apaga)

Este zapato no calza en mi pie,
este beso no despierta mi sueño.
Y hay tanta sangre y bilis y saliva
que gasto absurdamente...

Mientras tanto, vos volás,
elogiando al San Nadie;
y uno se conforma con uno,
con lo único que tiene.

domingo, 11 de octubre de 2009

Skunk

Viajando a través de mí,
contemplo el enigma
de tus piernas jóvenes,
aplacando mis días.

Morigerando las voces
que me llevan a tu voz;
-todo es nada- murmuras.
Por detrás, un adiós.

Me cansé de llevar los ojos en sombras,
Y que me esquives como a Pepe le Pew.
No te apures, no me esperes, no calles, no corras;
Sólo dame un presente ferviente de azul.